domingo, 17 de marzo de 2013

Santiago Siluro - Gizmo

Este Santiago Siluro es un caso.

Va el tío y me viene con una exclusiva, que según él, que va a revolucionar el mundo del periodismo... Yo pensaba que había entrevistado al hijo del Papa o algo así, pero no.

Él es un fan de las películas de su infancia, y los Gremlins es una de sus favoritas. Venía a contármelo con una camiseta de Gizmo puesta.

Y nada, aquí os dejo la entrevista, que os va a dejar con el culo torcido, seguro.




Santiago Siluro - Gizmo


Hola que tal, yo bien, gracias.
Hoy entrevistamos al protagonista de las películas Gremlins 1 y 2 de los 80: Gizmo.
Santiago - Hola Gizmo.

Gizmo - Hola. Como me llames Gizmo te pincho en un espeto. Llámame Natanael. Mi nombre real es Natanael Restprok Iturbide.
S - Vaya, tienen un apellido de origen vasco.

G - Sí. Mi madre era cortadora de troncos antes de irse a Alabama.
S - Te conocemos por protagonizar las dos películas que se hicieron sobre los Gremlins. ¿Qué más trabajos has hecho?

G - La verdad es que me volqué para que esas dos películas fueran un éxito, y creo que lo conseguí. Compuse incluso la música de algún pasaje de la peli con mi Casiotone, eran sobre todo las escenas de susto.
S - Veo que llevas una camiseta de la peli.

G - Sí, me flipa la 1. La 2 era una mierda seca.
S - Eres mu tonto.

G - Pues bien. Firmé un contrato de exclusividad con los productores, entre ellos Spielberg, que me prometieron una tercera parte de la entrega a cambio de no aparecer en ninguna otra película ni serie y mantener mi identidad ligada a la saga.
Rechacé ofertas para salir en las precuelas de Star Wars, haciendo de monete ninja o no sé qué mierdas; y para ser uno de los protas de Toy Story. Incluso me ofrecieron ser la mascota de Charlie Sheen en la serie Dos Hombres y Medio, pero tuve que decir no a todo. Incluso se pensó en hacer una segunda parte de la serie Webster, en la que yo sería el niño, pero mi problema de "hipertricosis", vamos, pelos hasta en los dientes, me lo impidió. Propuse teñirme de negro y todo...

Pero claro, la 3ª parte de la película no salía y yo me tenía que ganar la vida, así que trabajé de seguridad privada en una piscina de bolas, bedel de una guardería y cosas de poca monta. Al final con los ahorros que tenía decidí venirme a España y abrir un local de copas dirigido a famosos usando para ello mi popularidad. El local se llama Guimor in the Night. Toma una tarjeta, por si vas que te echen güiski del bueno en vez de garrafilla y te hagan precio de colega.
S - Vaya, así que estás atado a tu contrato.

G - Si, estaba de por vida, aunque ahora te cuento.
S - Pero veo que sabes vencer las adversidades.

G - Ahí andamos. Lo pasé muy mal de guarda de seguridad en la piscina de bolas, porque los niños de ahora son muy cabrones, y además no me conocen, y me hacían la vida imposible. ¿Ves esta calva? Un niño me quemó todo el lomo con el Zippo de su padre. En la guardería no había día en el que no me fuera a casa con la papilla en algún sito: en la ropa, en la mochila, metida en la funda del móvil...
S - Pero dices que con los ahorros bien invertidos, pudiste hacerte un hueco en la noche de Madrid.

G - No te he dicho que era en Madrid... diré a mis chicos que te investiguen...
Si, con el Guimor in the Night recuperé el glamour y la fama, recuperé también la inversión y pude ligarme a unas cuantas famosas.

S - ¿Y no se aprovechan para salir en Sálvame y esos sitios de prensa rosa?
G - Lo han intentado, pero me aprovecho de que en el mundo de la noche al final todo se sabe, y gracias a unas cuantas extorsiones, chivatazos y algún billete de los grandes puedo tapar bocas y mantenerme al margen de los paparazzi.

Y si no, tengo unos amigos del Este que me deben 2 o 3 favores... ya sabes. Les di trabajo como "puertas" en mi local y arreglé sus papeles.
S - Debes de tener ya unos años, ¿verdad? ¿Tu estatura y tu enfermedad te han cerrado puertas?

G - Todos piensan que soy un Gremlin de verdad. A ver amigos, los Gremlins sólo existen en la película. Cada vez que viene alguien a preguntármelo, le suelto un bofetón y se lo explico. Así ya no se le olvida.
Soy pequeñico, nada más; y si me mojo no me reproduzco, solo huelo a perro mojao.

Nací en el 60, así que ahora tengo 53 años. Lo que pasa que con mi pelazo no se me ven las arrugas, que tengo muchas, porque siempre me he cuidado bastante mal, no he respetado mi cuerpo. Ya sabes... el mundo de la noche... los excesos...
Mi enfermedad primero fue una bendición, porque con veintipocos, cuando mi destino sería entregarme a la ciencia, pude protagonizar Gremlins 1 y 2. Luego sí, el pelo de la hipertricosis unido a mi contrato exclusivo para Gremlins 3, me cerró hasta las puertas de mi casa. El casero me echó porque llevaba muchas churris a casa. Ahora duermo en el local de copas. Yo creo que al casero le daba envidia mi pelazo cardado ochentero.

Sin embargo he resurgido de mis cenizas y ahora estoy forrado. Incluso he roto el contrato exclusivo de Gremlins 3. Un día fui a casa de Spielberg, le solté un fajo de billetes, una colleja a rodabrazo, rompí el contrato en su cara, y me traje a su mujer a trabajar al Guimor in the Night. Nos queremos.
Alguna compi de rodaje de la época curra en mi local, ya que en esta profesión es muy malo encasillarse, y nos tenemos que ayudar.

S - Bueno Gizmo. Para terminar la entrevista ¿quieres añadir algo más?
G - Sí. No tendrás por ahí un cigarrito, ¿verdad?




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